Tips de buenas prácticas
Debido a que el movimiento de especies exóticas invasoras se debe a actividades humanas, es responsabilidad de toda la sociedad colaborar para evitar los efectos adversos que generan. La prevención del ingreso o la propagación de EEI se pueden transmitir mediante recomendaciones de buenas prácticas. Una vez las conozcas, comparte con familia y amigos esta información. El primer paso para proteger nuestra biodiversidad es conocer sus amenazas.
Tenencia responsable
de mascotas
Mantener una mascota es adquirir una responsabilidad para toda la vida. Antes de adquirir una mascota investiga, o exige al vendedor, información respecto de dónde proviene, cuánto tiempo vive, cuál será su tamaño adulto, qué comportamiento tiene y qué cuidados necesita. Piensa si tienes el espacio, disponibilidad y dinero para mantenerla en buenas condiciones durante toda su vida ya que puede crecer a un tamaño mucho mayor de cuando la compras. Si tienes dudas, no la adquieras.
Si piensas comprar una mascota exótica hazlo en tiendas especializadas. Es preciso obtener los documentos que demuestren que los ejemplares están debidamente certificados, legalmente adquiridos e importados y libres de parásitos y enfermedades que se puedan transmitir.
Jamás pienses la posibilidad de liberar a tu mascota en un ecosistema nativo. La liberación y/o abandono de cualquier mascota es maltrato animal, sumado a que al liberarlas éstas pueden causar serios daños a las poblaciones de fauna nativa, transmitir enfermedades y depredar especies vulnerables.
No vacíes el contenido de peceras/acuarios en ríos, lagunas y canales; los organismos y microorganismos que contienen pueden causar daños sanitarios y cambios ecológicos irreversibles. Tampoco tires a los habitantes de tu pecera al drenaje ya que algunos de ellos pueden sobrevivir y llegar a ecosistemas acuáticos y causar daños.
Prácticas responsable al hacer
turismo o senderismo
Al realizar caminatas en áreas naturales acude con ropa que no permita que se adhieran semillas de plantas, de manera de no operar como un vector dispersor de especies exóticas.
Limpia tu calzado y la ropa antes de ingresar a un área protegida.
Mantén limpio tu equipo de campo (zapatos, botas, bolsas, material de acampar, equipo de buceo, juguetes o flotadores) y vehículos (automóvil, bicicleta, motocicleta, embarcación, remolque) para evitar dispersar organismos y enfermedades que se pueden transmitir a la flora y fauna nativa.
No muevas tierra o leña de un sitio a otro, así evitas dispersar insectos, semillas o enfermedades.
Al salir de viaje no traigas animales, plantas ni semillas de otros sitios como recuerdo.